Mundo Abstracto

¿Cuántas veces hemos ido a comprar algo sencillamente porque nos gustó su color y al llegar a casa se ve completamente distinto? Personalmente culpo a la diversidad de cosas que rodean al objeto en cuestión, ya que no es lo mismo ver "algo solo" o acompañado de esos que se hacen llamar sus "derivados" a ver ese mismo "algo" junto a todos los colores del arcoiris.

En la calle se ven numerosas tiendas donde llama la atención el orden que le dan a sus productos que ofrecen. (Aunque jamás pensara en bordar con lanas como las de la imagen anterior, me dieron ganas de comprar uno de cada uno de los tonos que había allí).

El efecto visual es tan enérgico en las vitrinas que incita adquirir todo lo que vemos y creo que los colores son los responsables de que muchas veces adquiramos objetos inútiles, esos que compramos sin pensar y luego pasan meses guardadas, pero que al verlas decirmos: "Algún día lo puedo usar"...









Pensar por un instante en los siguientes lugares:

Una librería: donde vemos papeles de infinitos tonos y texturas, lápices, plasticina, etc
Una tienda de ropa: poleras, pantalones, chalecos, polerones, zapatillas, etc
Una florería: rosas, claveles, gardenias, tulipanes, azaleas, lilium, hortensias, etc
Una gelatería: helados de diferentes sabores y colores.

Todos estos lugares (y podría continuar), abusan de los colores de los productos para tentar al comprador. Todos estos lugares ocupan como único recurso a los colores para vender, ya que si todo fuera negro no tendría gracia, a esto lo llamo "mundo abstracto".

“… Sueño melodías blancas, con aromas de verbena limón, juegan azules de lavandas, Blancos de luz, verdes ocres de hojas y rojos geranios…” Alejandra Breemer Vio.

“ A veces las altas olas, traen en la palma de una gran mano verde, un tejido tembloroso: la tela inacabable de las algas…” Pablo Neruda

Es por eso que me atrevo a decir que hoy en día es más sugerente estar frente a una obra abstracta que frente a una obra figurativa, ya que estamos habituados a vernos rodeados de figuras infinitas y colores saturados, donde el único límite lo coloca la pieza que esta al lado. Probablemente decir “abstracto” puede sonar muy frecuente, pero resulta fascinante ver muchos objetos de una misma especie en diferentes colores.




valeria



Agradecimientos pertinentes a los lugares donde amablemente me permitieron fotografiar.

Insectos

Hace un par de meses la población chilena optó por reemplazar las ampolletas ordinarias por ampolletas de “ahorro energético”, con el fin de aplacar el alza de los precios. Estos son cambios pequeños que provocan que un elemento tradicional sea desplazado por nuevas tecnologías o tendencias.

Es esta relación entre un la ampolleta y la súbita metamorfosis en “insecto” lo que generó el contraste más notorio en este trabajo, el cual es una suma de antagonismos: blanco y negro; orgánico e inorgánico; presentación y representación.
La analogía entre “presentar” lo que fue elaborado mecánicamente y “representar” manualmente lo que una determinada persona ve, se traduce a una ilustración que cuenta con la vida y con el movimiento que plantea el trabajo mediante los insectos.

La aglomeración de las ampolletas caducas aludiendo a insectos y de sus respectivos dibujos cumplen con la nueva visualidad de la “ampolleta-insecto”, la cual intenta afirmar que para ser original solo basta con mirar un objeto precario y situarlo en un espacio donde tenga que decir algo diferente a lo que el espectador esta acostumbrado a leer de él, donde el discurso además tenga una dirección lo suficientemente flexible para crear nuevos diálogos. Por otro lado se hace presente el rescatar un objeto que dentro de algún tiempo no volveremos a ver.